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ARQUITECTOS: JOSÉ MANUEL MARTÍNEZ RODRÍGUEZ, ELENA RODRIGO PARDO, FÉLIX CABALLERO HERNANSANZ, MARÍA VICTORIA PANEDAS SIMÓN Y FRANCISCO J. HOYOS CARCEDO
Estructura: PEJARBO S.LPromotor: Cámara Oficial de Comercio Industria de ValladolidFecha de finalización: Diciembre de 2004Dirección de ejecución: José Luis MuñozEmpresa constructora: FERROVIALFotografía: Raffaella BompianiUbicación: C/ Vale de Arán, Valladolid
Vivero de empresas
Entorno
El solar del proyecto se sitúa en las inmediaciones del Barrio de España de Valladolid, en la confluencia con el parque Ribera de Castilla. Está situado en el límite entre lo natural y lo urbano, y remata en esquina una secuencia de pequeñas parcelas dotacionales que presentan una cara al parque, y otra a la calle Valle de Arán. Su geometría es ligeramente rectangular con un desnivel hacia la ribera de unos 5 o 6 metros.
Objetivos del proyecto
Se trataba de potenciar las vistas del parque y de la ribera del río, desde el Barrio de España y la C/ Valle de Aran, evitando la barrera visual que presentan los edificios colindantes y dotando a esta situación de ambigüedad de una cualidad especifica que combine elementos arquitectónicos de diverso carácter; público-privado, lleno-vacío, abierto-cerrado, con otros más paisajísticos.
Propuesta conceptual
Dos planos recortados, uno vertical y otro horizontal. El primero es un muro grueso perforado que enmarca el paisaje acentuando su carácter abstracto. Una línea de flotación blanca ligeramente apoyada, que contraste con el colorido cambiante de los árboles durante las distintas estaciones. El segundo, subraya la horizontalidad como base de apoyo del paisaje, con una capa despegada del suelo perforada verticalmente de cubrición vegetal que favorece la relación visual entre edificio y entorno. La transición entre lo público (la calle y el barrio), y lo privado (módulos de empresa), y a su vez entre los propios espacios interiores, debía generarse a través de esos binomios. Una serie de elementos intermedios que se materializan en espacios como en el gran atrio de entrada, o patio pasante horizontal que permite que el edificio (privado), sea atravesado por las visuales (público) desde la calle hacía el parque. Un espacio cubierto, pero a su vez, un vacío dentro de la volumetría del edificio. Del mismo modo, los patios de distinto carácter que se recortan en el volumen semienterrado, son vacíos y privados con un carácter público, al abrirse sobre espacios exteriores.
Propuesta espacial, formal y funcional
A diferencia de los edificios que se sitúan en la misma franja intermedia el edificio actúa como un filtro, elevándose sobre la cota de la calle y enterrándose en la pendiente hacia el parque. La topografía fue un dato esencial para la resolución del problema. Nos permitía, trabajar hacia abajo, sin llegar a enterrarnos totalmente, adaptando la volumetría a la suave pendiente del terreno. Esto nos permitía a su vez convertir las cubiertas de esta parte del edificio, en parterres de plantas y flores, que en primavera se funden con la vegetación del parque que actúa como fondo de las vistas desde el Barrio de España y la calle Valle de Arán.
El acceso se presenta como un gran mirador sobre el parque y sobre las cubiertas del edificio que actúa como quinta fachada. El programa se distribuye en cuatro niveles, el de acceso en planta de calle donde se sitúa el vestíbulo, recepción, administración y gerencia, la planta primera, para las salas de reuniones y una gran sala de usos múltiples, y las plantas inferiores destinadas a los módulos de empresa y demás espacios de servicio e instalaciones.